La Municipalidad de Ciudad del Este busca mejorar la seguridad vial al intensificar el control de la circulación de motocicletas a través de la Dirección de Tránsito y Seguridad Municipal.
El segundo operativo se llevó a cabo en la avenida San José, desde las 22:00 hasta la medianoche del sábado 13 de enero, reteniendo a todos los motociclistas para verificar la documentación, el uso del casco y el nivel de sonido de los roncadores de las motos.
Estos procedimientos son muy solicitados por la ciudadanía, especialmente en este sector de la ciudad, según destacó Claudia García, jefa de operaciones. «Hemos recibido varias denuncias de irregularidades viales de los motociclistas, y estamos respondiendo a las constantes quejas sobre los motociclistas en la Av. San José», remarcó.
También adelantó que próximamente responderán aleatoriamente a los reclamos ciudadanos con relación a la necesidad de control en otros puntos, como la Av. Perú. Recordó que, después del primer operativo, gran parte de los biciclos ya están en proceso de regularización gracias a la intervención. La mejor forma de incentivar a la ciudadanía a estar en regla es mediante el control, explicó.
El operativo contó con el apoyo de la Policía Nacional, y se realizaron varios cortes en la mencionada avenida para evitar que los motociclistas escaparan del control. El procedimiento consistió en solicitar al conductor documentos, indumentaria de conducción (casco y chaleco reflectante), además de la prueba de decibelímetro para supervisar el sonido de los roncadores.
Por su parte, el agente Jorge Silvero relató que el nivel regular de sonido de los roncadores oscila entre 60 y 80 decibeles. «Durante el operativo encontramos el nivel más alto de roncador de motos, con 117 decibeles», resaltó.
En total, 58 motocicletas fueron retiradas de circulación de forma inmediata. Por tanto, desde la Municipalidad, se apela a la conciencia de los conductores para que regularicen la documentación de sus motocicletas lo antes posible y eviten las molestias ocasionadas a la ciudadanía debido a los roncadores fuera de los límites de decibeles, así como al cumplimiento de las demás normas establecidas por la Ordenanza Municipal.
