Residentes del barrio General Pablo Rojas, en Ciudad del Este, expresaron su indignación por los cortes prolongados en el suministro de agua. Uno de los usuarios afectados, Carlos Aponte, dirigió un reclamo público a la responsable de la ESSAP, Cristina Calonga, exigiendo respuestas y medidas inmediatas.
Carlos Aponte es conocido en la comunidad por realizar denuncias casi diarias sobre la falta de agua en su barrio. Este patrón de reclamos resalta la persistencia de un problema estructural que afecta a los residentes de la zona, quienes dependen del servicio básico para sus actividades diarias.
El denunciante responsabilizó a los funcionarios de turno de regular o cortar el servicio de manera arbitraria. Según Aponte, esta situación refleja una grave falta de supervisión en la planta de tratamiento de agua. “Los empleados hacen lo que quieren ante la ausencia de su encargado”, afirmó en su escrito.
El reclamo también incluyó acusaciones de nepotismo y planillerismo dentro de la ESSAP. Según el usuario, algunos trabajadores estarían vinculados a políticos locales y recibirían salarios superiores a los 10 millones de guaraníes sin cumplir funciones activas.
Aponte destacó que, mientras algunos empleados cumplen con su labor, otros permanecen inactivos, perjudicando la calidad del servicio. Además, instó a las autoridades a investigar y sancionar a los responsables de esta situación. “Es urgente la intervención de la ESSAP en Ciudad del Este”, señaló.
A pesar de las insistentes denuncias de Aponte y otros usuarios, la ESSAP nunca se pronunció al respecto.
La situación en el barrio General Pablo Rojas pone de manifiesto las debilidades en la gestión de la ESSAP y refuerza la necesidad de una solución integral para un problema que afecta diariamente a la comunidad.



