Un hombre denunció el supuesto robo de su automóvil en el barrio Villa Bancaria de Ciudad del Este, pero al día siguiente lo encontró en una cuneta, todo por un pequeño detalle que su esposa olvidó: el freno de mano.
Ángel de Jesús Leguizamón Ocampo, de 34 años, reportó el 17 de marzo que su Volkswagen Jetta, blanco, con matrícula CDV-713, había desaparecido de donde lo dejó estacionado cerca de la plaza Santa Rita. Alarmado, llamó a la Policía y denunció un caso de hurto agravado.
Sin embargo, a la mañana siguiente, mientras el caso ya figuraba en el Sistema 911, el mismo denunciante se comunicó nuevamente con los agentes para avisar que había encontrado su rodado… en una cuneta.
¿Qué pasó? Según explicó a la Policía, su esposa había utilizado el auto y, al estacionarlo, lo dejó en neutro sin accionar el freno de mano. Como la calle tenía una bajada, el vehículo aprovechó la oportunidad y, sin conductor ni permiso, rodó hasta quedar atascado en la cuneta.
El auto fue retirado con una grúa y la denuncia quedó sin efecto. Ahora, más que un ladrón, en la casa de Leguizamón hay un tema pendiente: quién se encarga de recordar poner el freno de mano.
