La Dirección de Marina Mercante, dependiente del Viceministerio de Transporte, anunció la habilitación de un cruce fluvial entre Puerto Irala, en Paraguay, y Puerto Libertad, en Argentina. La iniciativa busca reducir el tráfico vehicular que actualmente congestiona el Puente de la Amistad y ofrecer una nueva opción para el transporte entre ambos países.
El proyecto contempla el uso de embarcaciones aprobadas por resolución N° 1040/24 del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). Además de aliviar la carga en el Puente de la Amistad, se espera que la nueva ruta fomente el turismo y el comercio en la región. Patricio Ortega, director de la Marina Mercante, señaló que esta será la primera vez en años que se incorporará una nueva embarcación para el cruce, lo que implicará mejoras en la infraestructura portuaria.
Detalles de la obra
La habilitación del cruce incluye la construcción de rampas de acceso para vehículos y la instalación de casetas de cobro en ambas orillas del río Paraná. Las operaciones contarán con todas las certificaciones necesarias, aprobadas por la Prefectura General Naval. Asimismo, la Cancillería paraguaya gestionó la reciprocidad con las autoridades argentinas para asegurar el funcionamiento del servicio.
Además del cruce entre Puerto Irala y Puerto Libertad, se prepara la habilitación de una embarcación de mayor capacidad para operar entre Otaño y El Dorado, en el departamento de Itapúa. Esta nueva ruta facilitará el transporte de camiones y vehículos, contribuyendo a descongestionar aún más el tráfico en el Puente de la Amistad.
En la región de Otaño y El Dorado ya operan balsas para vehículos livianos, pero el nuevo servicio incluirá el transporte de carga, beneficiando especialmente a productores de maíz que envían su producción a Chapecó, Brasil. Según Ortega, esto permitirá reducir la distancia de transporte y agilizar el comercio en la zona.
Las autoridades consideran ambas rutas como estratégicas para mejorar la circulación de personas y mercancías entre Paraguay y Argentina. La diversificación del transporte fluvial es vista como una medida necesaria para aliviar el congestionamiento que afecta al Puente de la Amistad, principal conexión terrestre entre Ciudad del Este y Foz de Iguazú.
Con estas nuevas rutas, se busca no solo facilitar el tránsito de personas, sino también impulsar el comercio y el turismo en las zonas cercanas a los cruces fluviales.