El próximo viernes 7 de noviembre, gran parte del país —especialmente el Alto Paraná y la región Oriental— podría enfrentar una situación meteorológica particularmente peligrosa, de acuerdo con análisis de modelos internacionales y alertas preliminares de especialistas en pronóstico del tiempo.
Modelos como el ECMWF, ICON y WRF/ECMWF, utilizados por servicios meteorológicos de todo el mundo, coinciden en mostrar una atmósfera muy inestable, con condiciones propicias para el desarrollo de tormentas de moderada a fuerte intensidad.
Los análisis muestran valores de energía elevados y vientos cambiantes en diferentes alturas, condiciones que favorecen la formación de tormentas rotatorias capaces de producir vientos destructivos, granizo grande e incluso tornados aislados.
El parámetro STP (Significant Tornado Parameter), que mide el potencial tornádico, muestra valores de entre 4 y 8 puntos, lo cual indica un riesgo elevado de tiempo severo significativo.
La mayor intensidad se concentraría entre el mediodía y la tarde, coincidiendo con el momento de máxima inestabilidad atmosférica.
El pronosticador Ángel Argüello explicó en sus redes sociales que este fenómeno se relaciona con la posible formación de un ciclón extratropical, un sistema de baja presión que se desarrolla cuando masas de aire cálido y frío se encuentran y comienzan a rotar.
Imaginó la comparación con una taza de cocido que comienza a girar cuando se la revuelve; en lugar de líquido, se trata de aire que gira alrededor de un centro de baja presión. En la región, cuando estos sistemas se forman con frentes, se los denomina ciclones extratropicales.
Argüello aclaró que estos ciclones no son iguales a los tropicales, pues suelen tener vientos menos intensos, aunque pueden generar fuertes tormentas y lluvias extensas.
Según el especialista, el fenómeno afectará a varias zonas del Cono Sur, incluyendo Paraguay, el norte de Argentina, el sur de Brasil y Uruguay, aunque no de la misma manera en todas las regiones.
En Paraguay se espera que las lluvias y tormentas sean más intensas al sur, sureste y este de la Región Oriental —Ñeembucú, Misiones, Itapúa, Caazapá y Alto Paraná— así como en áreas del centro y noreste, como Guairá, Paraguarí, Central, Asunción, Caaguazú, Canindeyú, Cordillera y el sur de San Pedro.
En otras zonas las tormentas podrían ser más leves, limitándose a lluvias sin fenómenos severos. Argüello recordó que ciclones de este tipo son habituales y se registran varias veces al año, aunque en esta ocasión confluyen factores que podrían potenciar sus efectos.
Podría decirse que se trata de un ciclón especial por la combinación de condiciones que presenta, pero no de algo fuera de lo común. Lo importante es estar informados y preparados.
Llamado a la calma y a la información responsable
El pronosticador insistió en que los meteorólogos no predicen con certeza absoluta, sino que estiman escenarios posibles en base a los datos disponibles.
Los pronósticos bien hechos no se equivocan; lo que falla muchas veces es la interpretación. Por eso es importante entender qué es un pronóstico y cómo actuar ante uno.
Argüello recomendó a la ciudadanía seguir fuentes oficiales, como la Dirección de Meteorología e Hidrología (www.meteorologia.gov.py), mantener la calma y tomar precauciones básicas durante los episodios de tormentas.
Recordó además que las tormentas son fenómenos naturales necesarios para el equilibrio climático, aunque pueden presentar riesgos puntuales dependiendo de la intensidad de cada evento.



